A casi 90 días del estado de emergencia sanitaria, la epidemia del dengue presenta cifras alarmantes.
El número de casos de dengue en el Perú continúa aumentando, a pesar de la expectativa de que el descenso de temperatura frenaría la propagación de los mosquitos transmisores Aedes aegypti. Según datos de la Sala Situacional del Ministerio de Salud (Minsa), hasta el 10 de mayo de 2024 se han reportado 211,456 casos de dengue, lo que representa un aumento de casi 18,000 casos desde la semana pasada (193,587 casos).
En la última sesión extraordinaria de la Comisión de Salud del Congreso, realizada el pasado 7 de mayo, el ministro de salud, César Vásquez, afirmó que la situación está bajo control. “Pedimos a la ciudadanía que siga contribuyendo con las actividades de control larvario y fumigación. No tenemos colapso por dengue. Estamos en una tendencia a la baja”, aseguró Vásquez.
No obstante, según el médico epidemiólogo Antonio Quispe, el Perú se encuentra en el pico de la epidemia. “Los indicadores que presentan en la Sala Situacional indican todo menos una especie de éxito en la campaña”, declaró Quispe a Departe.
Asimismo, el epidemiólogo atribuyó el aumento precipitado de los casos de dengue a una inadecuada campaña de control vectorial del Minsa, que tiene como objetivo limitar o erradicar la población de insectos que transmiten patógenos de enfermedades.
El Gobierno, según precisó, se ha concentrado en la fumigación, una estrategia que, incluso aplicada en horarios precisos y de forma repetida, solo logra reducir un 20 – 30% de los zancudos adultos.
Como alternativa, destacó la necesidad de abordar el problema desde múltiples frentes, como la eliminación de criaderos de zancudos, el control larvario de los depósitos de agua con larvicida, y la desinfección y el tapado de los recipientes de agua.
Cabe recordar que el Minsa destinó un presupuesto de 107 millones 585,222 soles en enero para combatir el dengue como parte del Plan de Prevención y Control del Dengue. Sin embargo, hay una grave escasez de pruebas de diagnóstico, insumos y personal médico, además de hospitales colapsados en Piura, La Libertad, Lima e Ica.
“La respuesta en contratación de personal y la compra de insumos se ha demorado, incluso hoy se están haciendo estudios de mercado para comprar pruebas diagnósticas”, declaró Pedro Riega, decano del Colegio Médico del Perú, sobre la situación actual del sistema de salud a El Comercio.
En efecto, el incremento de casos probables y defunciones en las últimas semanas refleja una alarmante falta de diagnóstico y tratamiento oportunos. Hasta ahora, el Centro Nacional de Epidemiología, Prevención y Control de Enfermedades ha registrado 56 086 casos probables, 201 muertes y 18,327 casos de dengue con signos de alarma, una fase premonitoria del dengue severo y letal.
A pesar de lo originalmente planteado, el Minsa tampoco ha logrado implementar estrategias novedosas que podrían haber evitado el repunte de contagios, como las vacunas contra el dengue o la liberación de mosquitos modificados genéticamente con la bacteria Wolbachia para reducir la transmisión del virus.
Ante esta situación, el doctor Quispe afirmó que se aproxima “un descenso muy doloroso con muchas muertes y muchos casos [de contagio] que se va a extender por las próximas ocho o doce semanas”.
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